También llamado Síndrome del Arca de Noé. Es un síndrome que afecta a las personas y se caracteriza por una acumulación de gran número de animales en sus hogares.
Los afectados por este síndrome empiezan alimentando a una pequeña camada de animales en la calle. Cuando los acogen en sus casas porque alguno necesite atención sanitaria, se encariñan del animal en el período de recuperación y ya no pueden dejarlo en la calle, abduciendo que no podrían desenvolverse como los demás animales.
Las camadas callejeras tienden a ampliarse cada año que pasa y estas personas entran en un círculo vicioso de recogida, veterinarios, recuperación del animal y, finalmente, acogida en sus casas. Así, sucesivamente, se juntan con muchos animales de los que no pueden desprenderse por el cariño que les tienen.
Los aquejados de este mal no son conscientes del síndrome. De hecho, se suelen tachar de «amantes de los animales«. Aunque el origen fuera salvar a uno o varios animales de una inminente muerte, al final se convierte en una obsesión por acumular el mayor número de animales para salvarles de la vida salvaje y llena de peligros del exterior de sus casas.
Las personas afectadas por este síndrome tienden a dar de comer a numerosos animales en sus casas. Esto degenera normalmente en una sobreprotección y en la consecuente acumulación de mascotas en pocos metros cuadrados.
Tantos animales para alimentar conlleva mucho aporte económico del afectado por el síndrome de Noé. También afecta a la salubridad de los hogares que acogen los animales, ya que éstos defecan y hacen pis en el domicilio. Un problema que se traslada a los vecinos del edificio, cuando los olores e, incluso, la orina llegan a sus casas.